La receta de los cruasanes que usaba hasta ahora estaba bien, no seré yo quien diga lo contrario. Pero había algo que no acaba de convencerme, su miga estaba más cerca del pan de leche que del toque hojaldrado que (al menos para mi) debe tener un buen cruasan así que, después de evolucionar la receta de pizza artesana que usamos en casa hasta un punto con difícil mejoría, ha llegado el momento de investigar en busca de una buena receta.
Después de un buen rato de investigación e interesante lectura en el foro del pan, me quedé con dos recetas bastante similares en cuanto a ingredientes y proporciones con las que empezar a trabajar, la de
la chica de las recetas y la de
l'exquisit. De estas dos, he seguido principalmente la de l'exquisit, incluyendo la elaboración usando prefermento y masa, y el resultado ha sido más que bueno: Un hojaldrado muy rico, una textura muy interesante (crujiente en superficie) y un sabor suave pero... Si. Hay un pero. El encapsulado de la mantequilla no ha ido bien y en el último pliegue y giro de la masa se ha abierto y ha perdido un poco al abrirse el laminado, por lo que no he podido extenderla todo lo necesario antes de formar las medias lunas de modo que las capas no han sido todo lo finas que me habría gustado aunque, como os digo, estan buenísimos.
Ya he tomado nota de las posibles mejoras y cuando los haga de nuevo, os contaré qué tal han salido.
He de reconocer que aunque el libro la cuchara de plata me encanta por la variedad y cantidad de recetas que incluye, le encuentro una pega importante y es que a veces estas últimas son casi telegramas y deja bien a la pericia o bien a la imaginación del cocinero datos que pueden considerarse fundamentales (p.e. temperatura del horno, tiempos de cocción u horneado e incluso las proporciones de algunas preparaciones...).
Aun así, como os digo, en él se encuentran fantásticas recetas como la de este sencillo bizcocho de naranja: Dulce, muy tierno y esponjoso.
- Ingredientes.
- 100g de mantequilla.
- 2 huevos.
- 100g. de azúcar.
- 200g de azúcar glas.
- 100g de harina.
- 3/4 cucharadita de levadura en polvo.
- 2 naranjas.
- Preparación.
Derretir la mantequilla al baño maría. Exprimir las dos naranjas (Previamente habremos rallado la piel de una de ellas para aromatizar la masa) y reservar el zumo para añadirlo después a la masa.
En un bol, batir los huevos con el azúcar y la mitad del azúcar glas. Incorporar la mantequilla fundida y volver a batir para, cuando la mezcla esté homogénea, añadir la harina previamente tamizada junto con la levadura. Seguiremos batiendo hasta que la mezcla no tenga grumos y añadiremos el zumo de las naranjas (excepto tres cucharadas, que reservaremos para el glaseado) y la ralladura para aromatizar.
Vertemos la mezcla en un molde que previamente habremos engrasado (o cubierto con papel de horno) y hornearemos a 175º durante unos 20-25 minutos si el molde es bajo (tipo tarta) o unos 30-35 si es alto (tipo bizcochera o plumcacke).
Mientras el bizcocho se hace en el horno, prepararemos con los 100g. de azúcar glas restante y tres cucharaditas del zumo que habremos reservado el glaseado con el que, una vez horneado, lo cubriremos. Una vez cubierto con la glasa, volveremos a llevarlo al horno para caramelizarlo.
Si os pasa como a mi y el glaseado tiene más zumo de naranja de la cuenta y no cuaja mientras lo preparamos, no importa: El bizcocho absorberá la naranja y quedará más jugoso.
Adenda a la receta: Es importante, al preparar el glaseado, añadir el zumo gota a gota al azúcar mezclando bien cada vez, de modo que podamos decidir en qué punto nos gusta la textura. Esto se debe a que, si no tenemos costumbre de trabajar con ella, al azúcar glas no es fácil pillarle el punto y una vez nos pasemos con el líquido, la glasa es muy difícil rectificar.
Creo que esta receta de los Kanelbullar (los bollos suecos de canela) es una de las que más trabajo me ha dado nunca y, de momento, es la única que he estado a punto de abandonar a la mitad porque creía que había algo que no estaba haciendo bien. Pero no, no era el caso. Lo que ocurría, sencillamente, es que la receta (que podéis encontrar en la página de Ondakín) es complicada y la textura de la masa con la que trabajar, muy compleja.
Os dejo la lista de ingredientes pero
la receta prefiero que la consultéis en la antigua página de Mikel, que para eso es el autor.
Sólo unas anotaciones sobre la preparación:
- La harina parece poca porque con estas proporciones la masa es extremadamente pegajosa y se hace complicado amasar y montar así que tened mucha paciencia y usar mucho papel de horno antiadherente pero no cambiéis las proporciones aunque aquello no parezca estar bien.
- Los bollos crecen mucho en el horno así que conviene separarlos mucho en la bandeja (no poner más de cuatro en una de tamaño normal) para que no se peguen entre ellos.
Ingredientes (para 12 bollos):
- 600g. de harina.
- 50g de levadura fresca.
- 500 ml. de leche entera.
- 250g de mantequilla.
- Azúcar.
- Semillas de anís.
- Pepitas de chocolate caramelizado.
- 1 huevo (para pintarlos).
- Ingredientes:
- 250 g. de hojaldre
- 4 manzanas
- Mantequilla, harina y azúcar vainillado (de repostería)
- 150 ml. de nata para cocinar
- 1 huevo.
- Una cucharada de canela molida.
- Preparación:
Engrasar una fuente con mantequilla para hornear las manzanas y precalentar el horno a 175º. Extender el hojaldre formando una única hoja que luego cortaremos en cuatro trozos lo suficientemente grandes como para envolver las manzanas.
Pelar las manzanas y sacarles el corazón que rellenaremos con una mezcla de la nata y la canela. Las ponemos en los cuadrados de hojaldre, las espolvoreamos de azúcar y plegamos el hojaldre como si fuese un sobre.
Con un pincel pintamos el hojaldre con el huevo batido para que se dore y horneamos durante unos 35-40 minutos, según el tamaño de las manzanas.
- Ingredientes:
- 3 Manzanas verdes (cuanto más ácidas, mejor)
- 2 Huevos frescos
- 1/2 Taza de leche
- 100g. de mantequilla (a ser posible sin sal añadida)
- 3 Tazas de harina
- 1 Sobre de levadura
- 1 y 1/2 Tazas de azúcar + 1/2 taza para la cobertura
- La ralladura de un limón
- Canela en polvo
- Esencia de vainilla (vainillín o similar)
- Preparación:
Precalentar el horno a 180º.
Pelar las manzanas y trocearlas finamente. Podemos reservarlas en agua con limón para que no se oxiden aunque corremos el riesgo de que después amarguen un poco. Mezclar en un bol la harina, el azucar, la mantequilla (mejor a temperatura ambiente) y la levadura hasta que tenga una consistencia terrosa y la mantequilla esté lo más disuelta posible.
Verter las 3/4 partes de la mezcla de harina en un molde para hornear formando la base. Cubrir con la manzana cortada formando una capa. Verter el resto de la mezcla de harina bien extendida para que la manzana quede bien cubierta e intentando que esta capa sea lo más compacta posible.
En un cuenco, batir los huevos y agregar la leche, la ralladura de limón y un chorrito del extracto de vainilla. Verter sobre la tarta con una cuchara poco a poco.
Mezclar la media taza de azúcar que hemos reservado para la cobertura con la canela y espolvorear hasta cubrir completamente (esta cobertura se caramelizará durante el horneado, creando un crujiente).
Hornear durante unos 30 minutos o hasta que metiendo la punta de un cuchillo salga seca (dependiendo del molde puede necesitar más o menos horno, según la altura).
- Ingredientes (8 personas):
250 g mantequilla a tª ambiente
200 g azúcar
2 cucharadas de azúcar avainillada
4 huevos a tª ambiente
150 +75 g chocolate de cobertura
135 g harina
natillas
pistachos al gusto
- Preparación:
Ver la receta original en Fotomerienda
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