No por el hecho de estar cuidándose un poco (o un mucho, eso depende de cada cual), tenemos por qué privarnos de algún capricho dulce con el que acompañar el café o las infusiones. Estas galletas, son un buen ejemplo de ello.
A partir de la receta de
galletas de avena y naranja con aceite de oliva (del siempre recomendable blog de
isasaweis), preparé una buena horneada adaptándolas a mi gusto con algunos cambios en los ingredientes: Añadí zanahorias (¡me encantan en repostería!), les quité el huevo y el zumo de naranja y, además, les reduje la cantidad de azúcar y aceite sin que se resintiera en absoluto su sabor ni textura.
Es cierto que sin el huevo el resultado está más cerca de la granola que de la galleta pero son jugosas, con una corteza crujiente y, gracias a la zanahoria, tienen un color muy atractivo.
- Ingredientes (para diez galletas):
- 100g de copos de avena.
- 50g de harina integral de trigo.
- 40g de azúcar moreno.
- 45g de aceite de oliva.
- 1 zanahoria grande rallada finamente.
- 1 c/s de miel.
- 1 c/c de levadura química.
- La ralladura de un limón.
- Una pizca de sal.
- Preparación:
Se mezclan los ingredientes en un bol, se dejan reposar diez minutos, y después, con las manos mojadas, se hacen "tortillitas" de medio centímetro de altura que hornearemos sobre papel de horno a 175ºC durante doce minutos.
Conviene dejarlas enfriar en rejilla durante unos minutos antes de comerlas pero... ¿quien soy yo para impediros vivir locamente?
Un pan ligeramente integral, con un fermentado largo y copos de avena. Ideal para bocadillos vegetales de inspiración nórdica: Rábano o pepino, un poco de remolacha y algún queso cremoso.
- Ingredientes:
(Para el prefermento)
200g agua.
200g harina integral de trigo.
1g de harina seca de panadería.
(Para la masa)
600g de agua.
1000g de harina de fuerza de trigo.
2g de levadura.
1c/s de sal.
50g de copos de avena remojados.
- Preparación.
Mezclar los ingredientes del prefermento y dejar reposar 12 horas. Transcurrido ese tiempo, mezclar con el resto de ingredientes (en primer lugar los húmedos y después la harina). Dejar reposar de nuevo durante 12 horas (esta vez en la nevera).
Amasar, añadiendo los copos de avena y formar los bollos (unos diez de buen tamaño), dejándolos reposar durante una hora y media o dos horas (deben doblar su tamaño, aproximadamente).
Hornear a 200º durante 45 minutos.